Soy artista visual, docente y mediadora cultural. Cyan Magenta es mi proyecto de creación desde el 2020. Consiste en retratar tesoros naturales encontrados en mis recorridos. Me gusta plasmar elementos disponibles en el camino, como flores, hojas y plumas caídas en los bosques, playas, cerros o ciudades, evitando alterar el entorno natural.
Suelo trabajar el tamaño postal. Resulta cómodo de transportar en las excursiones y, a la vez, propone un vínculo con la idea de viaje como vivencia exploratoria. También he ido experimentando otros soportes y tamaños.
Parques nacionales del sur de Chile, la cordillera de los Andes en el valle del Aconcagua, la cordillera de la Costa, las playas de la V Región y la floresta de Brasil en Sao Paulo y Bahía son territorios en donde he registrado estos tesoros. Rescato las opciones creativas que surgen del encuentro fortuito con lo descartado y olvidado. Lo aparentemente muerto es para mí una evocación a la permanencia.
La presente muestra inició su cauce en un tiempo pretérito indefinido, siendo la primera de carácter individual en la que participo.
Exhibe parte de procesos experimentales realizados principalmente desde la cianotipia (fotografía alternativa), medio que permite explorar posibilidades de transformación de la imagen en una copia azul. Un espacio poco convencional, el Espacio Temporal Lucrecia, se convierte en la vasija contenedora de momentos, formas y desplazamientos que convergen en estos ejercicios, nacidos desde la contemplación atemporal de la naturaleza, donde el vuelo de las aves se configura en símbolo de la convivencia con las modificaciones del entorno.
Bandadas de aves, plumas, éter, lo liviano.
Bosques, hojas, tierra, lo concreto.
Las aves se reúnen cuando hay abundancia. Naturaleza libre e indómita.
Las aves desaparecen cuando se incendia la tierra. Naturaleza presa, quemada y explotada.
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